La ciencia, y no la filosofía especulativa, es la única guía, por imperfecta que sea, de la naturaleza de la existencia. La cultura científica utiliza y apoya la ciencia. El cerebro social experimenta el libre albedrío y necesita la fe religiosa. La empatía es una elección basada en la intuición. Necesitamos una mejor comprensión científica del dogma y el chovinismo, y este libro explora estas cuestiones.
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